¿Cuál es tu producto imprescindible de maquillaje? Si tu respuesta es la máscara de pestañas, éste es tu post. Hoy te damos las claves para que le saques el máximo partido al producto fetiche de miles de mujeres.
Desde que se lanzara al mercado la primera máscara de pestañas, allá por el siglo XIX, ésta se ha convertido en uno de los productos de maquillaje más vendidos en todo el mundo. Miles de mujeres a lo largo de todos estos años han sucumbido a sus encantos porque, al margen de si te maquillas o no, la máscara de pestañas tiene el don de mejorar nuestro aspecto de forma espectacular con un simple gesto, siendo el broche perfecto de cualquier maquillaje. De hecho por más perfecta que sea su ejecución, sin la aplicación de la máscara, el maquillaje se ve inacabado.
Porque unas pestañas largas, espesas y curvadas favorecen. Esto es un hecho. Los ojos se ven más grandes y más despiertos. Este pequeño objeto de deseo obra el milagro rejuveneciendo de forma instantánea la mirada más cansada y apagada.
Buscando el Santo Grial
Las “máscara-adictas” somos como los templarios, vivimos en la eterna cruzada de buscar el Santo Grial, o lo que es lo mismo, la máscara perfecta que nos deje unas pestañas de escándalo y que además se vea natural; entonces, ¿cómo escogerla?
Es fácil perderse entre las mil y una opciones que puedes encontrar en el mercado, de manera que para no volverte loca debes analizar por un lado como es tu pestaña, y por el otro, que efecto quieres conseguir. No todas las máscaras buscan el mismo resultado ni a todo el mundo le gusta el mismo efecto.
A cada pestaña, su máscara
En el mercado hay máscaras de pestañas para todos los gustos. Las hay que dan volumen, que alargan, que definen, que dan un efecto de pestaña postiza… existen tantos tipos que es fácil perderse entre tantas opciones. Por norma general, si sigues las indicaciones que te damos a continuación, te resultará mucho más fácil orientarte.
- Si tus pestañas son finas y poco pobladas busca máscaras que den volumen.
- Si son largas pero sin forma, busca máscaras que aporten definición.
- Si son cortas, escoge máscaras que alarguen y definan, y huye de las máscaras que aporten volumen ya que dan la sensación de pestaña más corta.
- Si lo que buscas es un efecto más dramático y sofisticado, opta por el efecto pestañas postizas.
No todo está en la máscara, fíjate también en el aplicador
El aplicador es casi tan importante como la propia máscara. Cada tipo de aplicador crea un efecto determinado, de manera que si conoces el efecto de cada uno de ellos, reconocerás fácilmente cual es el que más te conviene.
Fíjate primero en el material del goupillón, o lo que es lo mismo, el cepillito aplicador. El más común suele ser nylon o rayón, ya que depositan más producto y suelen espesar más. También existen los cepillitos de silicona, que peinan y separan las pestañas sin dejar grumos, pero por el contrario aportan menos volumen.
Según la forma del goupillón puedes encontrar las siguientes opciones:
– Goupillón de cerdas largas: aportan mayor definición.
– Goupillón de cerdas cortas: aportan espesor
– Goupillón curvo: son ideales para rizar las pestañas.
– Goupillón fino: son ideales para alargar las pestañas.
– Goupillón grueso: aportan espesor.
Ya he escogido máscara de pestañas… ¿cómo me la aplico?
La aplicación de la máscara también influye en el resultado, con lo que, aunque se trate de un gesto rutinario y sencillo que has repetido millones de veces, pequeños cambios en la aplicación pueden hacer que el resultado sea mucho mejor.
- Para ello, lo primero que debemos hacer es preparar las pestañas. Si lo que buscas es maximizar el resultado, el riza pestañas será tu gran aliado. Utilízalo cuidadosamente para no dañarlas y siempre antes de aplicar la máscara.
- Coloca el aplicador de la máscara en la base y deslízalo hacia la punta con ligeros movimientos de zigzag para ayudar a levantarlas y separarlas.
- Durante la aplicación, si mueves el aplicador en horizontal tus ojos se verán más rasgados; si lo mueves en vertical se verán más abiertos.
- Nunca apliques la máscara de pestañas antes de aplicar la base o maquillar el ojo ya que solo conseguirás hacer que las pestañas se vean menos naturales y el color menos intenso.
- Insiste en la aplicación de producto en las pestañas del rabillo del ojo ya que son las que hacen que el ojo se vea más grande y almendrado.
- Si buscas un resultado ultra natural, aplícala solo en la base de la pestaña y deja libre la punta. Tus pestañas se verán mucho más tupidas y rizadas y parecerá que no llevas máscara.
- Si al aplicar la máscara manchas el párpado superior, límpialo con un bastoncillo ligeramente impregnado en agua micelar. Evitarás tener que desmaquillar el ojo y empezar de nuevo todo el trabajo.
Lo que nunca debes hacer
- Para que tu máscara mantenga sus cualidades durante más tiempo, evita bombear el aplicador dentro y fuera del envase: esto solo sirve para que entre aire y la máscara se seque antes.
- Por otro lado, uno de los errores más frecuentes es aplicar demasiado producto que hará que queden pegotes poco favorecedores. Para que esto no ocurra peina las pestañas con un goupillón limpio tras la aplicación de la máscara; ganarás en definición y naturalidad.
- Si tienes ojeras no apliques máscara en las pestañas inferiores ya que esto genera sombras que las acentúa.
- Nunca apliques dos capas de máscara en las pestañas inferiores, el resultado no es favorecedor ni natural.
- No uses tu máscara de pestañas durante más de 6 meses. La zona ocular es muy sensible a sufrir infecciones e irritaciones con lo que toda precaución es poca para mantener la salud de tus ojos. Piensa que cada vez que introduces el cepillito en el envase, una vez finalizada la aplicación, estás introduciendo pequeños restos de suciedad microscópicos que se van acumulando en el envase.
- Y por último recuerda, la máscara de pestañas, así como los lápices de ojos, deberían ser personales e intransferibles. Es la mejor manera de evitar contagios oculares. En el caso de que necesites compartirlos, utiliza aplicadores desechables en el caso de las máscaras de pestañas y haz punta a los lápices de ojos antes de utilizarlos.
Ahora ya sabes cómo sacarle el máximo partido a tu máscara de pestañas. ¿Estás preparada para lucir unas pestañas de infarto?